miércoles, 12 de mayo de 2010

Ahí es Wendy, la segunda estrella a la derecha, volaremos hasta que amanezca.


La primera vez que vi Peter Pan (versionada por Disney cómo no) había nacido ya mi primer hijo. Contemplé alucinada como con unos simples polvitos de hada aquellos niños traviesos se echaban a volar. Wendy, Mikel y John se elevaban emocionados por el nublado cielo londinense acompañados por Peter y Campañilla… Fue entonces cuando recordé algo, los polvos mágicos que a mí me habían hecho volar durante mis años de infancia…este diario, nadie lo leerá nadie jamás, pero si alguna mente malpensada lo hiciera, seguro creería de inmediato que dichos polvos son drogas o algo del estilo… pues no, son polvo de tiza.

Era sólo una niña cuando descubrí que en la bohardilla de la casa de mis abuelos había una enorme pizarra de una tía segunda que había sido maestra en los tiempos de la II República (cuando todavía estaba abierto el colegio). Tenía prohibido subir allí porque según decía mi abuela era peligroso; pero mientras mi abuelo iba al bar a tomar el café y mi abuela se echaba la siesta, yo, subía a hurtadillas por las desvencijadas escaleras y pasaba la tarde curioseando. Aunque debo reconocer que el día que descubrí la pizarra, todos los demás objetos del ático perdieron interés para mí. Aquella pizarra fue testigo de mis primero e inseguros trazos literarios. Las líneas torcidas y desiguales se mezclaban y combinaban en la lisa negrura que, casi olvidada, parecía sorprendida de verme allí, como un preso sin esperanzas amnistiado el día anterior a su ejecución.

Tras el experimento solía borrar las huellas de mi intromisión con las mangas de la camisa o con los flecos de la falda de mi uniforme escolar. Cuando mi abuela, sofocada tras subir el último tramo de escaleras me descubría toda sucia y sonriente, me sacudía enfurecida con aquel paño grisáceo que llevaba siempre colgando del mandil. Para mí aquel polvo que me irritaba los ojos y me resecaba la garganta haciéndome toser, aquel era mi polvo de hadas, el que me hacía volar al país de Nunca Jamás y para vivir alocadas y absurdas aventuras de Indios, Piratas y niños que no querían crecer.




Ese es su propio polvo de hadas... el mío son las sonrisas de mis amigos por la mañana, el olor a chocolate y a crêpes, los besos, las paginas gastadas de los libros de segunda mano, los detalles, la palabra "carcajada", los abrazos y los rumores que dejais los que me leeis.
Y a vosotros, ¿qué os hace volar?

11 comentarios:

  1. Es mi película de disney favorita, sabes? Y aun padezco el síndrome de Peter Pan :)

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  2. Yo tengo las recus la semana que viene y me tengo que presentar a casi todo, vamos, que la pau para septiembre.. pero bueno, con tranquilidad y buenos alimentos porque como siga así me da un ataque de pánico!

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  3. Ay, qué mona. Ya te imagino con los restos de tiza en la carita de niña curiosa :)
    Un beso MUYGRANDE.

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  4. A mi de pequeña no me gustaba nada Peter Pan, me empezó a gustar de mayor, cuando lo veía con mis sobrinas... tengo la teoria de que es un cuento para adultos.

    ;)

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  5. a mi me hace volar, el chocolate, un viaje, un dia de lluvia, la cancion, un beso, un adios.

    el ultimo texto me hizo dar un par de vueltas, hasta ese entonces pense que la primera parte era tu diario.
    un saludo en la lejania.

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  6. Yo quiero una hada madrina...que me toque la lotería y dejar de trabajar...
    Peter pan,tenía su lado bueno,pero también su lado malo porque se va a perder muchas cosas siendo siempre niño.

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  7. Me enternece imaginarte :)

    No hay nada como volar con una buena cancion de fondo.

    Un beso :)

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  8. Encantador blog el tuyo, un placer haberme pasado por tu espacio.

    Saludos y un abrazo.

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  9. siempre me consideré una niña perdida, y hasta llegó un momento en mi vida en que alguien me enseñó como llegar a Nunca Jamás, ya sabes, un pensamiento feliz y una pizca de polvo de hadas (que aún guardo en una cajita..). A veces la destapo y salgo a volar..

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  10. yo tengo el síndrome de Peter desde hace siglos :D

    ..y volar... a mí mehacevolarmishistorias :)

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Es mejor arrepentirse por lo que has dicho que por lo que no... :)