sábado, 10 de abril de 2010

El primer (des)amor.

-Sientes un extraño cosquilleo en el estómago, como si millones de mariposas revolotearan dentro de ti, es algo maravilloso…- contestó su abuela cuando le preguntó qué pasaba cuando uno se enamora.

- Es como si tu corazón le perteneciera a otra persona. Además solo te apetece compartir tu vida con él, es lo que a mí me pasa con tu padre que en mi vida ya no soy sólo YO ahora somos NOSOTROS, lo compartimos todo ¿lo entiendes?- le explicó su madre.

- Estas todo el tiempo pensando en esa persona y solo quieres estar con él…bueno con él y con sus cuadraditos - suspiró la hija de la portera.

-Haces cosas juntos, cosas de novios, como ir al cine pasear mucho, daros besitos, ir de la mano, suspirar cuando se pone el sol…- le contestó su amiga Marieta con aire sabiondo.

-Os regaláis cosas, habláis cuando uno está triste, no se hija… ¡es que haces unas preguntitas! ¿Le has preguntado ya a tu madre?- la despachó su padre mientras hacía la cena.

Marta siguió preguntando a todos sus vecinos, compañeros de clase y a su familia… finalmente tomó una dura decisión: le diría a Pablito que no quería ser su novia. Después de darle muchas vueltas decidió que enamorarse no tenía ninguna ventaja. No estaba dispuesta a tener dolor de tripa ni mucho menos a darle su corazón a nadie. Tampoco quería dejar de quedar con sus amigos ni compartir sus chucherías. Además no le interesaban para nada los problemas de Pablito y le daban igual los cuadraditos y los circulitos, y sobretodo, le daban arcadas solo de pensar en darle un beso, ¡qué asco! Lo único bueno que tenía era lo de los regalos, pero teniendo a Papá Noel y a Los Reyes Magos ¿Quién quiere un novio? Marta ya tenía 7 años y en ese mismo momento prometió que no se enamoraría nunca. Por suerte, no todas las promesas se pueden cumplir.


Yo no quiero domingos por la tarde;
yo no quiero columpio en el jardin;
lo que yo quiero, corazón cobarde,
es que mueras por mí .

J.Sabina

9 comentarios:

  1. Muy acertada al escoger los nombres :)
    Puede que sea mejor no tener pablitos en tu vida, guardar las distancias, fingir que no te preocupan los demás y que nadie te hace falta, pero en definita es eso, algo fingido, es mentira.

    Un besillo geme :)

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  2. coincido con la persona que escribio arriba sobre la precision de los nombres. un clavito que ate no es lo que ella busca, pero, como vos dijiste, por suerte no todas las promesas se pueden cumplir. muy bueno lo que escribiste.-
    esa letra de sabina es tan sincera y romantica que me cuesta escucharla.
    un saludo en la lejania.

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  3. Muy original.El amor es algo diferente para cada persona.
    Lo bueno es compartir las diversas opiniones.
    Un saludo! :)

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  4. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  5. Qué original, para gustos los colores!
    Para mí el amor es volar y enamorarse consiste en encontrar a la persona lo suficientemente increíble a la que coser tus alas, para subir a la nube y allí arriba decirle que en cuanto le ves sientes latir tu corazón.
    Un beso!

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  6. Al compás de un -contigo- las promesas repercuten en la panza (y en las fuerzas para dormir) yal final pues duele; a lo mejor todo es moméntaneo y solo quedan recuerdos.
    Magnífico. Saludos

    P.D dicen que por la boca muere el pez :P

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  7. Encantador blog el tuyo, un placer haberme pasado por tu espacio.

    Saludos y un abrazo

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  8. :) esa promesa no se cumplirá, y menos mal!

    qué tierno tu texto, de verdad.

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  9. Me he hartado de reír!!
    Es genial, quién fuera ella... quién cumpliera us promesas...

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Es mejor arrepentirse por lo que has dicho que por lo que no... :)